Durante junio, el peso mexicano se ha posicionado en sus niveles más altos frente al dólar una situación no vista desde hace casi una década; después de que nuestra divisa lograra romper la barrera de los $18 pesos por dólar, ha contado con una racha positiva colocándose en el rango de los 17.12 a 17.20 pesos por dólar. 

Uno de los factores más importantes para medir la salud de la economía nacional es sin duda el valor de nuestra divisa. Hoy los expertos financieros lo llaman ‘superpeso’ y sin duda esto demuestra el movimiento del mercado a favor de nuestro país. Sin embargo existen distintos elementos que debemos tomar en cuenta antes de celebrar y preguntarnos cómo afecta este fenómeno a nuestro negocio. 

Entendamos primero que el peso se ha apreciado gracias a distintas circunstancias, tales como el nearshoring, la demanda de nuestra divisa, la confianza de los inversionistas, el aumento en las inversiones en nuestro país, así como elementos externos que afectan directamente a nuestro principal socio comercial: Estados Unidos.

Es altamente probable que tu negocio cuente con alguna relación con el país vecino, ya sea que operes allí, cuentes con proveedores o utilices el dólar con mayor constancia. A aquellos negocios cuya fuente principal de ingresos está en dólares, es posible que vieran mermadas sus ganancias, por ejemplo. 

El peso mexicano se ha convertido en la moneda líquida más fuerte de Latinoamérica, esto quiere decir que gracias a la confianza que inversionistas han depositado en las operaciones comerciales del país, esta se puede comprar y vender con facilidad, y negociar con ella en altos volúmenes. Además, las tasas de interés altas impuestas por el Banco de México, han contribuido a que nuestro país sea mucho más atractivo. 

Los mayores afectados negativamente por el crecimiento del peso son los importadores debido al abaratamiento de sus mercancías, mientras que las exportaciones y los receptores de remesas se ven impactados en su poder económico. 

Si bien esta circunstancia es extraordinaria debido a la convulsa economía global que tuvo cambios importantes por la interrupción de la cadena de suministro durante la pandemia de COVID-19, también es una oportunidad para expandir el negocio y priorizar al peso como moneda de cambio. 

Aquellos negocios que únicamente operen en el país no se verán directamente afectados, de hecho, si importan mercancía sus ganancias serán mayores gracias a su abaratamiento. Es momento de evaluar el momento macroeconómico para tomar decisiones frente a este fenómeno positivo del fortalecimiento del peso. 

De acuerdo con los expertos analistas, la desaceleración económica de Estados Unidos afectará a la economía mundial, lo que puede provocar una nueva depreciación de nuestra moneda, pero no será significativa. 

El superpeso trae consigo buenas noticias y que seguramente podrás aprovechar en tus transacciones de negocio. No dejes pasar las oportunidades.