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No entiendo a las nuevas generaciones

Los Millenials (aquellos nacidos entre 1981-1995) ya representaban un reto para las empresas, ahora con la Gen Z (nacidos entre 1996-2012) muchos líderes de negocios no hallan cómo integrar a esta nueva fuerza de trabajo. 

Vamos a explicarlas a grandes rasgos, porque si bien son cercanos aún en edades, sus preocupaciones, intereses y costumbres son distintos. 

Millennials

El joven Millenial más grande, ya no es tan joven, en 2024 ya cuenta con 43 años, lleva muchos años integrado a la fuerza laboral y seguramente es jefe de un Gen Z que apenas comienza a trabajar. 

Ambas generaciones han sido fácilmente confundidas debido al uso de tecnología, sin embargo debemos recordar que los Millennials vivieron la transición digital, ¿qué significa esto?, los Millennials nacieron cuando no había internet de forma pública, aprendieron a usarlo cuando estaban estudiando la secundaria o la preparatoria. 

Conocieron los walkman y muchos los utilizaron, vieron la tecnología avanzar a pasos agigantados, viviendo cambios revolucionarios de un año a otro: pasaron de una computadora armada a una laptop, a una mini laptop; de un teléfono Nokia que sólo realizaba llamadas y enviaba SMS a los primeros pasos de una BlackBerry (el primer teléfono inteligente) hasta un iPod Touch y el primer iPhone. Las redes sociales apenas comenzaban y contaron con mayores oportunidades de relacionarse socialmente persona a persona. 

Ellos transitaron las primeras alertas del cambio climático, son la generación que vieron perdidas las posibilidades de adquirir un hogar o de jubilarse del trabajo. Se caracterizan por ser la generación más educada y sin embargo la más frustrada en términos de estabilidad económica. 

Gen Z

Los nacidos en el nuevo milenio carecen de habilidades tecnológicas análogas. El uso de tecnologías avanzadas es su fuerte, ellos comprenden cómo funcionan a profundidad las redes sociales y el internet de las cosas. 

Nacieron con la preocupación del cambio climático y creen profundamente en el cambio de hábitos hacia lo “friendly”: eco friendly, LGBTfriendly, pet friendly, etc. 

A sabiendas que el futuro no es prometedor, ellos toman la vida mucho más a la ligera, hacen planes a corto plazo, se enfocan en los placeres que existen como viajar, cuidarse físicamente y tener relaciones personales más libres, así como trabajos más creativos. 

Debido al impacto de la pandemia, los más jóvenes batallan con el relacionamiento social cara a cara, sin embargo encontraron en las redes sociales un espacio de emprendimiento y crecimiento personal. Están más enfocados en el cuidado de su salud mental que otras generaciones anteriores a ellos. 

¿Por qué es importante conocer y entender las nuevas generaciones? 

Porque ellos son la fuerza de trabajo principal y los próximos líderes de las empresas. Sus costumbres han revolucionado la forma en la que se trabaja y sus ideas han roto paradigmas importantes, mejorando así el clima organizacional

Sus preocupaciones personales y sociales influyen en cómo se educan y cómo producen. Ambas generaciones buscan que el trabajo sea el medio que les permita vivir y no su vida entera. 

Entre sus coincidencias está priorizar la convivencia con amigos, familia y el tiempo de esparcimiento. Se sienten más cómodos realizando trabajo remoto que trasladándose a una oficina, ya que ahorran recursos y contaminan en menor medida. 

Han demostrado ser más productivos cuando se les permite cierto nivel de innovación y libertad. No escatiman en exigir su derecho al descanso y su necesidad de reconocimiento. 

Estas dos generaciones no están tan apegadas al trabajo como las anteriores, la razón fundamental está en que ningún trabajo les ofrece una estabilidad a largo plazo, por lo que son agentes más libres y tienden a rotar con mayor facilidad. 

Sin embargo, casi 9 de cada 10 personas de la Generación Z y Millennials consideran que el propósito de la organización donde trabajan es importante para su satisfacción laboral y es más probable que rechacen empleos que no se adapten a sus valores.

Si en verdad las organizaciones desean impulsar su operación a largo plazo, es fundamental que ellas sean las que se adapten a los nuevos usos y costumbres de las generaciones más jóvenes. 

En el caso de las empresas familiares, es de suma importancia pensar en heredar a las generaciones más jóvenes que pueden sobrellevar mejor las transiciones. La resistencia al cambio puede convertirse en un profundo problema de supervivencia empresarial. 

¿Tú tampoco entiendes a las nuevas generaciones? Invítalas a ser parte de tu equipo y juntos transformen el negocio. 

Recuerda que en PDN te acompañamos con recursos financieros para dar el paso a ampliar tu nómina a las nuevas generaciones. Es tiempo de cambio.

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