Con la evidente caída del Producto Interno Bruto (PIB) en 2019, y los pronósticos a la baja de instituciones financieras como Banxico y el FMI, no parece que México crecerá mucho este 2020.
Sin embargo, ¿qué es exactamente el PIB y cómo afecta a las empresas? El Producto Interno Bruto es la suma de todo lo producido al interior de un país, bienes y servicios únicamente, ya que la materia prima viene sumado al producto final. Esta suma pretende medir el crecimiento de un país sin contemplar otros factores, por ello se le llama Bruto.
De acuerdo con la Condusef, las PyMEs, por su parte, aportan más del 50% del PIB y generan el 72% de empleos del país. Esto no necesariamente quiere decir que las PyMEs estén fallando, el PIB se ve afectado por múltiples factores que no dependen únicamente de las unidades económicas base, y ni siquiera de las decisiones -polémicas o no- de un sólo gobierno.
La economía global está en desaceleración, esto ha provocado la disminución del costo del dólar, la falta de inversión extranjera y la disminución de flujo de capital en los mercados. Con la reciente ratificación del T-MEC, la región norte de nuestro continente se verá altamente beneficiada y las PyMEs aún más.
El potencial decrecimiento del PIB no sólo puede conllevar la pérdida de empleos o la baja en las oportunidades de negocio, sino también puede traducirse en una nueva ventana para explorar nuevos territorios para evitar que las PyMEs pierdan.
Las pequeñas y medianas empresas al ser base principal de nuestra economía, son palanca de crecimiento, si el PIB no crece, tu empresa puede expresar lo contrario y consolidarse en tiempos difíciles, esto sucede frecuentemente en países como Estados Unidos, la economía más poderosa del mundo.
Además, el Gobierno federal, a través de la Secretaría de Economía ayuda a impulsar a los negocios, y también existen alternativas como alianzas financieras -financiamiento, sociedades, aceleradoras y otras- para continuar creciendo frente a estos retos.
Tu PyME puede usar estos escenarios a su favor, explorar nuevos mercados, nuevos productos y aprender a innovar. El PIB es un reflejo de la actividad económica, y este decrecimiento también está impulsado por la desconfianza. No hay que temer, la economía bajo el modelo actual siempre será un subeybaja que únicamente las empresas que se atreven a innovar y se arriesgan, lograrán superar.