Ya hemos platicado en este espacio de la importancia de gestionar equipos adecuadamente para impulsar el negocio. Pero esta responsabilidad no solo le corresponde al CEO o al líder de la empresa, sino a su staff, quienes deben poseer habilidades y estrategias para lograr que el talento a su cargo haga un buen trabajo y se reduzcan las pérdidas por la rotación de personal.
Técnicas clave para gestionar a los equipos eficaces
A continuación le compartimos algunas técnicas clave para gestionar a los recursos humanos de su empresa y que pueden ser muy útiles para los líderes de área:
1. Establecer objetivos
En una empresa, todos los empleados, desde altos directivos hasta trabajadores de cualquier área, deben saber cuáles son las metas de la empresa, y conocer los métodos y procesos para alcanzarlas. Los objetivos deben ser: específicos, medibles, alcanzables, realistas y planeados para cumplirse en un tiempo determinado. Estos normalmente provienen del staff, y se les conoce como “objetivos en cascada”; parten de la planificación financiera y la estrategia.
2.Proporcionar los medios para cumplir los objetivos
Esto puede parecer una obviedad, sin embargo muchos gerentes que fracasan es debido a que no proporcionan los medios, herramientas y dirección necesarias para alcanzar los objetivos. El talento no es el único responsable de proveer su experiencia, el negocio debe acercar los recursos tecnológicos, logísticos, informativos y más para lograr las metas.
3. Entorno organizacional saludable
Además de proporcionar el espacio y las herramientas adecuadas, una cultura organizacional sana es indispensable para que el equipo de trabajo se desenvuelva y pueda trabajar efectivamente. Instruya a su área de recursos humanos a ser más activos en el desarrollo personal y profesional de los trabajadores, a formar parte del diálogo para resolver conflictos y a que se conviertan en agentes confiables en caso de denuncias o abusos.
4. Gestión del tiempo en el lugar de trabajo
Una investigación realizada por la OCDE, publicada en la revista The Economist, concluyó que cuanto más trabajaban las personas, más disminuye la productividad. Ensayos de disminución a jornadas de 7 horas han demostrado incrementar hasta en 15% la productividad. No se trata de hacer que el equipo trabaje más o menos, sino de optar por una gestión adecuada de la jornada (no permita que se queden horas extras, por ejemplo) que se enfoque al cumplimiento de los objetivos, más que por el tiempo que el talento permanece en el lugar de trabajo.
5. Motivar al equipo
Es necesario saber motivar a un equipo, tanto de forma general, como a cada una de las piezas que lo componen. Proponga nuevos retos, ofrezca recompensas, fomente su participación en las decisiones de la empresa y reconozca su trabajo.
6. Abrir los canales de comunicación
Uno de los errores que cometemos al ser líderes de un equipo es la falta de comunicación que se vive en una relación vertical. Hágale saber a su equipo que está disponible para escucharlo y dé retroalimentación sobre su desempeño. Esta es una de las mejores formas de estrechar la relación con el grupo y permite poner en común los conocimientos y tareas de cada trabajador para evitar fallos por culpa de malentendidos o procesos mal definidos.
7. Confianza
La confianza es una de las técnicas más importantes en la gestión de equipos, y sin duda, es el elemento principal que hay que trabajar entre los componentes del mismo. Así, todos tendrán la libertad de expresar lo que sienten y se sentirán apoyados desplegando su talento. Los jefes demasiado autoritarios no son percibidos positivamente por el equipo, inspiran temor o antipatía, pero nunca respeto y, por tanto, no podrán sacar lo mejor de su equipo. Hay que mostrar confianza en el equipo, saber escucharles y delegar cuando sea preciso.
8. Gestión del conflicto
Los conflictos son comunes en todos los ámbitos, busque alternativas para tratarlos sin caer en el enfrentamiento. Usted u otros líderes pueden actuar como moderadores para dar soluciones a los problemas entre los integrantes del equipo; un conflicto bien solucionado fortalecerá las relaciones. Es necesario saber diferenciar entre el ámbito profesional y personal y dejar este último a un lado.
9. Claridad en las prioridades
Algo muy común en las empresas es que se considera todo importante, y así es, todas las funciones de cada miembro del equipo son relevantes, sin embargo existen las prioridades. Déjelas claras. Solo los líderes tienen visibilidad en qué es prioritario en pro de cumplir con los objetivos.
10. Equipo equilibrado
El gestor del equipo tendrá la oportunidad de crear su propio equipo, por lo que es necesario contar con integrantes compatibles con el propio líder y que a su vez, puedan aportar elementos novedosos a la empresa. Recuerde que al reclutar talento, su equipo debe contar con personas que estén más capacitadas que el nuevo miembro. Será el único medio para alcanzar el éxito.
11. Conocimiento de fortalezas y debilidades del equipo
Cada elemento en lo individual colabora para que el equipo y la empresa sea capaz o incapaz de cumplir con los metas, un buen líder de área debe conocer cuáles son sus puntos fuertes y débiles y cómo se pueden aprovechar sus virtudes por el bien del negocio.
12. Orientación del talento
Las personas con talento no son fáciles de gestionar ya que suelen ser líderes natos, creativos, rebeldes, por lo que la cabeza de proyecto deberá detectar dónde está ese talento en el grupo y orientarlo hacia el objetivo grupa para evitar que se disperse o no se aplique por el bien de la empresa.
13. Trato respetuoso
Es importante respetar el tiempo, la dedicación, el compromiso y la situación personal de los compañeros. De esta forma, la motivación del equipo será buena y, por consiguiente, la gestión de equipos de trabajo en la empresa será eficaz.